La papa es un cultivo que tiene una de las huellas de carbono más bajas en Dinamarca y aporta una gran cantidad de calorías por metro cuadrado cultivado. Hace 90 años, esta empresa comenzó a producir harina de papas y hoy en día han abrazado la transición ecológica, ya que suministran fécula y proteínas de papas a diversos productores de alimentos para sustituir a las proteínas animales. Puedes leer la noticia completa aquí.